u e s r a H i s t o r i a
Espíritu del Oeste: Un Legado de Pasión y Origen Artesanal
En Espíritu del Oeste, nos propusimos redescubrir la verdadera esencia del tequila. Por lo tanto, honramos su origen sin llamarlo directamente por su nombre. De hecho, este destilado artesanal es el resultado de una tradición ancestral que revive su pureza y sabor natural, sin aditivos ni procesos industriales.
Además, nuestro tequila, antiguamente conocido como Vino Mezcal en los tiempos de antaño, lleva consigo el carácter único de San Sebastián del Oeste. A 1,800 metros sobre el nivel del mar, esta tierra mágica imprime, por consiguiente, en cada gota una mezcla de grandeza, rebeldía, pasión y origen, que se refleja tanto en sus agaves como en la dedicación de las manos que lo crean.
Nuestra Historia
a E s e n c a e l o A u t é n t i
Nuestra Historia
á s q u e n a b o r , u n a E x i n c i a
spíritu del Oeste no es solo un destilado; de hecho, es una conexión profunda con la historia, la pasión y el origen de la región donde se produce. Cada sorbo, por lo tanto, transporta al corazón de las montañas del sur de Jalisco, evocando un sentimiento de arraigo, admiración por sus tradiciones y, además, una conexión con su pasión y origen.
Por ello, disfrútalo preferentemente en compañía, ya que Espíritu del Oeste es una invitación a explorar la magia de su origen. Más allá de deleitar el paladar, deja una huella imborrable en quienes lo descubren, convirtiéndose, en consecuencia, en un homenaje a las raíces y a la autenticidad de un México que nunca deja de sorprender.
spíritu del Oeste no es solo un destilado; de hecho, es una conexión profunda con la historia, la pasión y el origen de la región donde se produce. Cada sorbo, por lo tanto, transporta al corazón de las montañas del sur de Jalisco, evocando un sentimiento de arraigo, admiración por sus tradiciones y, además, una conexión con su pasión y origen.
Por ello, disfrútalo preferentemente en compañía, ya que Espíritu del Oeste es una invitación a explorar la magia de su origen. Más allá de deleitar el paladar, deja una huella imborrable en quienes lo descubren, convirtiéndose, en consecuencia, en un homenaje a las raíces y a la autenticidad de un México que nunca deja de sorprender.